-Llego a su casa y llamo a la puerta.
-Tras unos segundos veo que nadie abre la puerta y me temo lo peor. -
¡Byakugan! -Miro a través de la puerta y encuentro a Kenneth en el suelo cerca del salón. -
¡Joder! -Me quedo atónito cuando lo veo. Rompo la puerta con la palma y recojo a Kenneth del suelo. -
¿Estás bien? -No responde, está inconsciente. Lo subo sobre mi hombro, salgo de casa y lo llevo hacia el hospital.
Hospital