Vuelteciita despues del primer entrenamiento- equipo yoniruke

-Bueeno... -suspiro mientras camino despacio, con Riku-chan a un lado y Sora-chan al otro. -Ahora cada una a cambiarse a su casita, ¿no? -ellas asienten. Estamos tan cansadas que no podemos ni hablar. -Entonces nos vemos luego. -suspiro finalmente, empezando a andar dirección el barrio Kuroi. A los pocos minutos me detengo.
Mierda, soy idiota. Este ya no es mi barrio... Elegí ser una mierda de ninja antes que una miembro del clan. Vuelvo sobre mis pasos sumida en mis pensamientos hasta que llego con mis compañeras. -Ignorar eso. -gimo. -No sé ni dónde estoy. -me muerdo el labio un segundo. -Chicas, voy a ir a hablar con Yoniruke-sensei antes, luego paso paso a cambiarme. -informo de esto último mirando a Riku, ya que vivimos indefinidamente bajo el mismo techo. -¡Hasta luego! -y echo a correr rumbo el Icharaku Ramen, pensando en todas las preguntas que quiero hacerle a Yoni.

off: no tengo sueño o.q me aburro

- Hane, espera un segundo! - digo intentando llamarla, pero ha salido corriendo y ya no me escucha... La necesito para saber llegar a la casa de Yoni-sensei.
Ahora estoy perdida. Sora se queda mirándome, extrañada. Sonrio al recordar que ella aún estaba conmigo.
- Tú.. ¿por dónde vivías exactamente?

- El clan Kokonoe esta al lado del clan Uchiha, al suroeste. Si quieres vamos primero a mi casa y luego pasamos por la de Yoniruke para que te cambies. O tambien puedo dejarte algo de ropa y vamos directamente después al puesto de ramen. ¿Que te apetece hacer? - la miro con una sonrisa de oreja a oreja.

Sora-chan es tan simpática ^.^
- Te acompaño a tu casa
No quiero interrumpir el camino de Sora ni hacer esperar al resto.
Mmm.. el famoso clan Uchiha, que interesante sería conocer a sus miembros. (OFF: Itachi!! )
- Sora-chan, ¿cómo es tu familia? - pregunto mientras seguimos caminando.

-Mi familia... - hago una mueca de asco.- Mi familia es una mierda. Mis padres estan muertos y mi abuela me odia. El único con el que puedo contar es con Ren, mi hermano, pero apenas lo veo. Siempre esta con misiones. Así que solo me queda mi gato.

Al pensar en mis padres me ha asaltado una ola de tristeza. Ahora mas que nunca los hecho de menos, si estuvieran aquí todo sería mas fácil.

Me paro en frente la puerta de mi casa y le digo a Riku:

- Te dejo ropa seca y nos vamos. Me muero de hambre.

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